Prepara un Cold Brew Coffee, la receta más popular para los días de calor

¿Has oído hablar del Cold Brew Coffee o el café macerado en agua fría? Esta bebida se ha popularizado mucho en los últimos años y si no la has probado seguro que has visto a alguien tomándola en algún café. Su preparación es bastante sencilla, te lo contamos a continuación.

El café macerado en frío tiene sus particularidades, es un 60% menos ácido y amargo que los cafés preparados en caliente y, además, su sabor es más aromático. El resultado es un café de gran calidad con una cantidad más alta de cafeína, ya que a mayor tiempo en contacto con el agua, mayor cafeína suelta el grano.

Su preparación necesita tiempo, pero tiene una ventaja, puede prepararse en la cantidad que apetezca y guardarse en el frigorífico durante una semana. Por esta razón, el Cold Brew Coffee se posiciona como una alternativa sostenible al consumo de café en casa.

Tips para preparar Cold Brew Coffe en casa

Elaborar el Cold Brew Coffee es sencillo (en la imagen encontrarás el método paso a paso). Lo importante es contar con un buen café y con agua mineral, para lograr la bebida más pura posible. Este arte de macerar el café con agua fría nos permite apreciar la esencia del café de una forma distinta y el café para filtro Limmu Kossa Etiopía nos aportará un gran abanico de aromas.

Para conseguir un buen resultado, la molienda tiene que ser más gruesa porque durante la maceración estos granos se disuelven cada vez más y se vuelven más finos. Una vez mezclados los 100 g de café con los 1000 g de agua, se puede macerar en cualquier recipiente, lo importante es que se pueda tapar. 

Al contrario que un espresso, dónde obtenemos el café de forma casi instantánea, el Cold Brew Coffee necesita entre 12 y 24 horas para estar listo para servir. Esto significa que todas sus características organolépticas, el sabor, el olor y sus aromas, se obtienen por tiempo de maceración y no por calor. Pasado este tiempo, filtramos la mezcla con un colador, un filtro o tela ligera y lo guardamos en el frigorífico. Lo puedes tomar diluido con agua, en proporción 1/2 o 1/3 y con una tira de piel de naranja o limón.

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